El 25 de octubre se celebra el Día Internacional de la Piel de Mariposa o Epidermólisis Bullosa, que es nombre científico, una enfermedad rara de la piel que no tiene cura, las personas que padecen esta enfermedad tienen la piel tan frágil como las alas de la mariposa, asimismo presentan ampollas muy dolorosas que no les permite hacer una vida normal.
El Servicio Departamental de Salud SEDES La Paz se une a la conmemoración del Día Internacional de la Piel de Mariposa con la finalidad de concientizar a la población sobre este mal que, afecta a 1 o 2 personas de cada 50.000 habitantes y es hereditaria, se transmite generalmente de padres a hijos, manifestándose en el nacimiento o en los primeros meses de vida.
Se clasifican en 3 categorías dependiendo de la capa cutánea a la que afectan, estas son:
Simplex: La rotura se produce en la capa superficial de la piel (epidermis). Las ampollas cicatrizan sin pérdida de tejido.
Juntural: Las ampollas aparecen en la zona situada entre la capa externa y la interna de la piel.
Distrófica: Las ampollas aparecen en el estrato más profundo de la piel, la dermis. Al cicatrizar, las sucesivas heridas van originando retracciones en las articulaciones, llegando a dificultar seriamente el movimiento.
Según los últimos datos de la red mundial ‘DEBRA Internacional’, se estima que la incidencia es de 1 entre cada 17.000 y 50.000 nacidos vivos, y la prevalencia es de 1 de cada 100.000 personas. La edad de supervivencia son los 50 años y la enfermedad comporta complicaciones infecciosas, nutricionales o neoplásicas. Actualmente no tiene un tratamiento eficaz.