Cada año, se estima que entre 2.500 y 3.000 niños y niñas bolivianos nacen con cardiopatía congénita, de acuerdo con la Revista Hitos —publicación de la cooperación alemana en Bolivia y Paraguay, en el país andino los casos de cardiopatías congénitas se han incrementado anualmente y, en regiones altas como Bolivia, “la probabilidad de nacer con cardiopatía se duplica” (2020, p.5).
Las cardiopatías congénitas, son anomalías cardíacas o predisposición a las mismas, muy frecuentes relacionadas generalmente a infecciones que pueden tener una evolución desfavorable, se presentan desde el nacimiento, se desarrolla dentro del vientre de la madre.
Según los datos estadísticos del Instituto Nacional de Estadística (INE) gestión 2022 nacieron en el país 350.000 niños y niñas con cardiopatías congénitas, con ese dato podemos hacer un cálculo que de 3 mil a 5 mil niños nacieron con esta enfermedad en el departamento de La Paz, señaló el Dr. Jesús Miguel Posos, Jefe de la Unidad de Cardiología del Hospital del Niño “Ovidio Uría». Las muertes infantiles por este mal pueden evitarse si son diagnosticados oportunamente.
El 70% de estos bebes requieren un tratamiento quirúrgico, por ello la importancia de la detección oportuna, en su mayoría se puede corregir a través de una Cirugía Cardiaca, puntualizó el especialista.
Es importante tener el hábito de llevar a los niños a sus controles regulares, incluyendo cuando no esté enfermo, y así detectar a tiempo esta enfermedad. Los síntomas o signos que se presentan son: soplo, insuficiencia cardiaca, alteraciones del ritmo y cianosis. Algunos síntomas comunes de una cardiopatía congénita que puedes tener un adulto son: Ritmos anormales en el corazón (conocidos como arritmias), una coloración azulada de la piel, labios y uñas (cianosis) y dificultad para respirar.